Era
ayer al caer la tarde, derrotado tras una jornada ardua de trabajo, bajo un sol
abrasador de injusticia como está siendo este julio asfixiante e inclemente.
Era ayer al caer mi tarde, cuando empieza a sosegarse el día, en el momento que
la luz empieza a perder su fuerza, en el tiempo en que las sombras llegan para
quedarse y expandirse. Era ayer al caer la tarde, vencido y polvoriento, con el
hálito justo en los pulmones y el hedor rancio a sudor de quien ha consumado
las horas del día cuando me encaminé a la ducha como lo hago tantas veces al
caer mi tarde.
Jamás
sabré porque, como nunca sabré porque hago otras tantas cosas impulsivamente solo
porque tengo la imperiosa necesidad de hacerlo, desconozco si esto se llama
destino, sexto sentido o fuerza extrasensorial, pero en ocasiones ocurre, y
ayer en pleno baño de los de al caer la tarde me dio por frotar la alcachofa de
la ducha.
No
estaría demasiado tiempo frotando, o al menos no tengo consciencia de ello,
pero de repente el agua se cortó sin accionar yo ningún mando, sorprendido me
puse a mirar los agujeros por donde debería estar saliendo el agua por si
estuvieran taponados y de ellos empezaron a brotar una especie de líneas de
humo que se iban agrandando y agrupando hasta convertirse en una gran nube, la
nube fue cambiando de color y cogiendo forma humana, mejor dicho, mitad humana
mitad espectro.
Primer deseo |
Hola me
dijo, soy el genio de la alcachofa, gracias por haberme liberado, llevo años
ahí metido, arrugado del continuo contacto con el agua, abrasándome con el agua
caliente del invierno y congelándome con el agua fría del verano… En
agradecimiento a mi liberación te concedo 3 deseos, pero ojo!!!, no puedes
pedir cosas como la paz en el mundo, la erradicación del hambre en la tierra,
etc… Soy un genio, no soy Dios, tendrás que apañarte con cosas menos
trascendentales… Tampoco vale pedir un deseo que contenga más deseos, ni
ferraris ni mansiones, ni salud, dinero o amor… solo serán 3, utilízalos bien.
Como
soy un tipo curioso y siempre me ha fascinado la Luna, de ahí que sea medio
lunático, le pedí que me descubriera algún secreto de los que aún se desconocen
de ella. Me reveló que la Luna no se ve debido a la rotación de la Tierra ni
nada de esto, que eso solo es una patraña científica para intentar explicar lo
que no se sabe de ella, en realidad la Luna tiene vida propia y posee su propia
personalidad, tiene el poder de aumentar y disminuir de tamaño como los peces
globo, cuando el día se va acercando ella va disminuyendo su tamaño y se
esconde en las chimeneas donde pasará escondida prácticamente todo el día, a la
Luna le gusta salir de noche.
Segundo deseo |
Pensando
en que podía pedir a continuación, caí en la cuenta de cómo está todo, el
panorama actual, la crisis, pero ya me había advertido que no podía interceder en
favor de mis conciudadanos, asique me tocaba ser egoísta obligatoriamente,
pensé en mi futuro… a quien no le preocupa el futuro???, debí de ser más
conciso en mi deseo, haber sido más específico, pedí que nunca me faltara el
pan, y di por hecho que entendería que no me faltase el sustento, que viviese
con la comodidad de quien sabe que siempre tendrá algo que comer… Pero el hizo
que apareciese montado en un tractor ante un campo de trigo… si me faltaba el
pan a partir de ahora sería únicamente culpa mía….
Estaba
ya un poco descorazonado con esto de los deseos, al fin y al cabo no podía
pedir grandes cosas ni verdaderamente importantes y puede ser también que el
cansancio del día me llevase instintivamente a malgastar mi tercer deseo, el
caso es que pensando en el trabajo diario le insté a que mejorase mi condición
laboral y ante mi apareció un tubo de vaselina….
Tercer deseo |
Harto
ya del maldito genio y de sus ironías accioné el mando del agua caliente a
máxima potencia, y fui mojando la nube con forma mitad humana mitad espectro,
hasta que el peso del agua lo fue tendiendo en el suelo de la ducha, hasta que
la fuerza de la corriente lo fue arrastrando entero por el desagüe, hasta que
ya no se vio ni rastro de genio por el sumidero.
MORALEJA:
Déjate de sueños, de deseos inútiles, cuidado con lo que deseas porque nunca se
corresponderá en absoluto con la realidad, con tu realidad y procura ser feliz
con lo que tienes, que la vida te pillé sonriendo al caer tu tarde.
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