SALIENDO DEL ARMARIO.

Es difícil sacar a la luz algunos aspectos de tu vida que la gente desconoce, es muy difícil mostrarse cada uno tal y como es, desnudarse al mundo  y  enseñar tus cartas al contrario, desenmascararse para mostrar la realidad sea del color que sea.

Me doy cuenta de lo influenciados que estamos en ciertos momentos de nuestra vida; niñez, adolescencia…  y que posteriormente marcarán nuestro camino, nuestras actitudes o incluso nuestros gustos, aunque de primeras no lo queramos reconocer, lo desechemos  o simplemente no hemos sido conscientes de ello.

Recuerdo perfectamente la música que llevaba mi padre en el coche siendo yo un niño, y que seguramente me marcaría de por vida, entre otros, alguna cinta de rancheras, algún casete de Juan Pardo, recuerdo uno de la banda sonora de la película Enmanuelle, y el que más me gustaba de todos una recopilación de Rock and roll de los 60.

Por las rancheras no me dio, y de la banda sonora de Enmanuelle me gustaba que en la carátula aparecía una señora enseñando las domingas, pero he de reconocer que a día de hoy me siguen gustando unos cuantos temas de Juan Pardo, no hablo del archiconocido y pasteloso “bravo por la música”, tu pones  el tema “Estrellas”, escuchas  la letra; una historia de desamor contada entre borrachos en un bar de carretera…. No se puede ser más punky!!! Del casete de Rock de los 60 doy gracias a mi padre por darme a conocer a Elvis, Little Richard, Gene Vincent o Beatles, fijo que de ahí saldría mi vena rockera.

Si sigo tirando de disco duro, seguramente también me influenciaría y mucho la música que ponían por casa mis hermanas en aquellos maravillosos ochenta, la radio sonaba sin parar mientras se hacían las labores del hogar y yo aún era un mico como para que me enrolasen en la patrulla de limpieza, o un jeta en una España sexista, que también puede ser, el caso es que ponían la radio y yo me iba empapando musicalmente, obviamente tenía capacidad de decisión y de aquella me calaron mucho grupos como Queen o Ramoncín, si si , el mismo Ramoncín que ahora tanto criticáis.

De hecho el “Barriobajero” de Ramoncín fue la primera cinta original que me compré, el rock se había infiltrado en mis venas con intención de quedarse y de hacerse más brutal con la radicalidad de la adolescencia, solo había cabida para rock, punk, heavy y derivados, que no me diesen más que lo tiraba por la ventana, no es que no estuviese abierto a otras cosas, es que estaba cerrado totalmente, la edad de la insultante ignorancia….

Llevo ya un tiempo saliendo de mi armario musical, es difícil y cuesta, pero es bueno, por una parte para seguir reafirmándote en grupos que te gustaban porque ves también la basura que hay fuera y madre mía…  y por otra porque te das cuenta que te estabas perdiendo grandes cosas, y me dejo asesorar por quien quiera mostrarme algo interesante (siempre y cuando tenga algo de criterio), y da igual que vengan de un chaval de 21 o de un tío de 52, todos tienen algo que enseñarme y de todos siempre hay algo que aprender.

Últimamente me estoy dejando arrimar cebolleta por los “popis”, “indies” o como leches se llamen y como en todo hay de todo, los hay de escuchar su música y querer cortarte las venas y también otros que no difieren tanto de los rockeros, incluso con mas actitud rockera que muchos rockeros y veo grupos y descubro cosas que me molan mucho… Y me doy cuenta que la música solo es música, y lejos de estilos, etiquetas y tonterías varias creo que una buena canción siempre será una buena canción, venga de un tío con los pelos hasta la cintura, de uno con gafas de pasta y camisa hawaiana  o de unos tíos con camiseta blanca de tirantes….. Será cosa de mi adultescencia!!!.