Causa furor en YouTube videos come este, en que una cámara es colocada a lomos de un águila con el fin de rodar y capturar su recorrido, la grabación de poco más de un minuto ha sobrepasado ampliamente la barrera de los 7 millones de visionados, hay que reconocer que está filmado en un lugar de una belleza excepcional, al parecer por lo que he leído en los comentarios el "animalejo" sobrevuela el glaciar la Mer de Glace (Mar de hielo) en el valle de Chamonix en pleno macizo del Mont Blanc (Alpes franceses), planea majestuoso entre las montañas, provocando una sensación de libertad inigualable, y poniendo un punto de vista al que no estamos habituados, roza los pinos demostrando la maestría de su vuelo y recordándonos que ella es la dueña y señora del cielo.
Todo esto está muy bien, pero opino que todas la aves voladoras grandes (águila, cóndor, buitre...) tienen un volar... aburrido, suben muy muy alto, y aprovechando las corrientes planean, planean y planean... Ni Aníbal del equipo "A" planeaba tanto... Hasta el pequeño colibrí me impresiona más en su vuelo, ya que puede quedarse en un punto fijo, incluso tiene marcha atrás, y alcanza una velocidad de hasta 50 batidas de ala por segundo, estos datos si me parecen alucinantes!!!.
Si le pegamos otra vuelta de tuerca más, a mí me hubiese impactado mucho más si hubiesen colocado una cámara a lomos de una mosca.... eso sí sería la ostia (perdón, es la emoción..), el montaje ya de por si supone todo un reto, la cámara tiene que ser minúscula porque si no la mosca no podría con ella, partimos de la base de que sabemos que una mosca puede volar al menos cargando con su propio peso, es decir otra mosca encima, si te fijas bien en verano puedes ver continuamente moscas cargando otras moscas, supongo que se tratará de moscas que se cansaron a pleno vuelo y para no caer al vacío las "moscas buenos samaritanos" las recogieron y cargaron con ellas....
Una vez consigamos construir la "cámara peso mosca", habrá que colocársela perfectamente, de forma que el peso esté compensado, para que no le haga perder el equilibrio de un lado o del otro, también es muy importante que esté muy bien aferrada al cuerpo del animal para que no se mueva durante el vuelo, poniendo especial cuidado de no asfixiar al bicho.
Cámara instalada ya podemos prepararnos a filmar un documental propio de Oscar, esto si será un viaje alucinante, subidas de golpe, bajadas vertiginosas, de lado, rozando los muebles de la cocina, posándose en el techo boca abajo (seguro que esto no tiene narices de hacerlo el águila), vuelta otra vez a volar, esta vez en busca de un humano, se posa en su nariz, se puede ver un súper primer plano de la mano del humano pasando a escasos milímetros de la mosca, esta escena reproducida a cámara lenta será exquisita.
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