Observadores Onanistas

lunes, 19 de mayo de 2014

Me llamo Forrest.... Forrest Gump!!!




Recuerdo lo que me gustó cuando vi por primera vez Forrest Gump, era una historia fresca, original, divertida, emotiva… Si algún día quisiera dedicarme a ser crítico de cine jamás debería decir esto, pero como no creo que se dé el caso y además se me empiezan a caer ya las escamas de pensar y decir lo que otros quieren que piense o diga, lo diré: Forrest Gump está dentro del ranking de mis películas favoritas.


Aún con todas las críticas mundiales positivas, como no en nuestra España “Sálvame de luxe” se oyeron perlas como que era un film superficial y ultraconservador, una vez más haciendo gala a nuestro afán destructor, al fin y al cabo las críticas pueden decir misa mientras los números acompañen, y los números de Forrest Gump acompañaron y empañaron los cristales de las taquillas con el calor del dinero de las recaudaciones brutales y estrepitosas que solo proporcionan los éxitos mundiales a los que se acude en masa.


Enormes me parecen los “brochazos” de la película a la historia de los Estados Unidos; la guerra de Vietnam, el movimiento Hippie, las manifestaciones, el escándalo Watergate, la alusión a la compañía Apple, la importancia que le dan a su liga de futbol americano y a sus universidades entre otros, y enormes me parecen las “apariciones” porque eso no son cameos son “apariciones” de; Elvis Presley, John F. Kennedy, Lyndon B. Jonhson, Richard Nixon o John Lennon.


A fuego quedarán en nuestra memoria frases como; la vida es como una caja de bombones…., me llamo Forrest, Forrest guuuuuuuuuuump o corre Forrest, corre.


Que sí, que está claro que es una película de “sueño americano”, persona con retraso mental y motriz que va superando trabas, consiguiendo logros y cruzando metas, que con su lucha y su tesón rompe con las barreras sociales y propias y llega al encumbramiento, a ser un personaje destacado público y económicamente acaudalado.


Se pueden decir muchas cosas sobre esta película, demasiadas, yo sigo descubriendo matices y encontrando aportes desde su estreno en 1994, y me gusta verla nuevamente cada año; 1,2,3 veces… quien sabe… y me quedo con los edulcorados guiños de verdades como puños como por ejemplo el desmesurado cariño de madres a hijos, sean como sean, o por ejemplo el lugar que ocupa en nuestras vidas nuestro primer amor (en la película Jenny), esa cálida, cándida e inexperta experiencia de amor desmedida y desbocada que te hace perder la cabeza, me quedo con los placeres no carnales que también saben reflejar en la película de correr y segar la hierba, al principio nada de estas dos cosas las veía como tal, Forrest las dos las hacía gratis, ahora entiendo el trasfondo, y puede que os parezca un loco incluso puede que lo sea pero pocos placeres son comparables al de correr y cortar la hierba, con beneficios espirituales instantáneos… me quedo con la importancia de las amistades verdaderas, las que siempre se han dicho que se cuentan con los dedos de una mano, las que se suponen que son de por vida (Teniente Dan Taylor), e incluso me atrevería a decir que hasta en la muerte (Bubba), y me quedo por supuesto con el mensaje de que todo es una rueda, y la vida gira, y das vueltas, y hoy estás arriba y mañana estás abajo, la “historia se repite”, y la pluma que sobrevuela la vida al principio de la película vuelve a escapar del libro en la que Forrest la tenía encerrada y retorna a su vuelo, a su libertad de recorrer el mundo, a donde quiera transportarla el aire.







2 comentarios:

  1. Emocionante. Es una de mis pelis preferidas, siempre lloro, me llega al alma.

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    1. El gusto que da de vez en cuando comentarios como este... Gracias por leerme.

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